Un hombre de 61 años, identificado como R.A.D., fue detenido en la ciudad de Córdoba después de permanecer prófugo durante más de tres meses, acusado de abusar del hijo menor de su ex pareja en la provincia de Santa Fé.
Según medios locales, el arresto se produjo el miércoles pasado tras un operativo coordinado por la División Capturas de la Policía de Investigaciones de Santa Fé, con colaboración de las fuerzas cordobesas, luego de varios meses de tareas investigativas.
El procedimiento tuvo lugar en el barrio Marcos Sastre, conocido como “Docta”, donde R.A.D. fue localizado tras la denuncia por supuestos ataques sexuales contra el menor. El detenido quedó a disposición del Juzgado de Control de Córdoba, mientras la fiscal Jorgelina Moser Ferro, del Ministerio Público de la Acusación en Santa Fe, gestionó el exhorto de extradición para trasladarlo a los tribunales santafesinos. El traslado está previsto para el próximo lunes, y la imputación formal se realizará la siguiente semana.
Según se informo el sospechoso trabajaba en un organismo estatal en Santa Fe y desapareció luego de tramitar su jubilación por internet. Los investigadores siguieron sus huellas desde junio, cuando la justicia santafesina había emitido la orden de captura. El hallazgo requirió un minucioso entrecruzamiento de datos, seguimientos discretos y el intercambio de información entre ambas policías provinciales.
R.A.D. será imputado por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante calificado por la convivencia.
En un caso relacionado, agentes de la Dirección de Investigaciones de Trata de Personas y Operaciones Complejas de la Policía de Buenos Aires detuvieron a Walter Daniel Jiménez, de 52 años, quien se mantuvo prófugo desde 2019 tras ser acusado de abusar sexualmente de su hijastra de 10 años.
Jiménez fue arrestado en julio mientras caminaba por Ingeniero Budge, tras extensas tareas de seguimiento en la zona. La orden de captura incluía alerta roja de Interpol. Los abusos, que comenzaron cuando la menor tenía cinco años, quedaron registrados en denuncias y exámenes forenses que constataron daño físico y psicológico en la víctima.
Durante la instrucción judicial, peritos del Cuerpo Técnico Auxiliar del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil realizaron evaluaciones psicológicas y físicas que evidenciaron abuso sexual de larga data, con rotura de himen y fisura lateral. La víctima presentaba comprensión sexual inusual para su edad, sobreadaptación, tristeza, desesperanza, trastornos alimentarios, episodios de disociación y depresión.
Jiménez fue imputado por abuso sexual con acceso carnal agravado y corrupción de menores, considerando la convivencia con la víctima y la relación de guarda preexistente.