Nigeria consiguió un triunfo fundamental en su camino hacia el Mundial 2026 al superar 1-0 a Ruanda en un encuentro correspondiente a las Eliminatorias Africanas. El partido tuvo de todo: la lesión de Victor Osimhen, su estrella más desequilibrante, y un gol tan extraño como espectacular en la parte final del juego.
La acción decisiva llegó gracias a Tolu Arokodare, flamante refuerzo del Wolverhampton inglés, quien marcó de manera poco común: una pirueta desde el suelo, casi debajo del arco, que terminó siendo la jugada que definió el encuentro.
El resultado le permite a Nigeria mantener vivas sus aspiraciones en una clasificación sumamente ajustada. Con tres fechas todavía por disputarse, los “Súper Águilas” quedaron a seis puntos del líder Sudáfrica y a solo uno de Benín. Vale recordar que en cada grupo el primero avanza directamente al Mundial, mientras que el segundo obtiene la chance de un repechaje.
El calendario de los nigerianos marca un choque decisivo este martes como visitantes ante Sudáfrica en Bloemfontein. Más adelante, cerrarán su participación en octubre visitando a Lesotho y recibiendo a Benín, lo que podría definir el futuro de la selección en el torneo.
La gran preocupación, sin embargo, es la condición física de Osimhen. El delantero del Napoli debió abandonar el campo en el primer tiempo con una molestia en su tobillo izquierdo. Su evolución será clave y su presencia en el próximo compromiso todavía no está garantizada, lo que enciende las alarmas del cuerpo técnico y de todo el país.