Las Fuerzas Armadas de Ucrania ejecutaron operaciones dirigidas contra infraestructuras estratégicas en territorio ruso y en zonas ocupadas de la región de Lugansk durante la madrugada del 3 de noviembre de 2025, según informó el Estado Mayor General ucraniano a través de sus canales oficiales, incluyendo Facebook y Telegram. Los ataques afectaron principalmente instalaciones del sector energético y logístico ruso, dentro de una ofensiva que busca debilitar la capacidad de abastecimiento y la base material de la ofensiva militar rusa.
Uno de los objetivos principales fue la refinería de petróleo de Saratov, ubicada en la región homónima. El Estado Mayor indicó que los ataques provocaron un incendio en la zona del complejo de unidades de refinación ELOU AVT-6, una de las secciones más importantes de la planta. Esta refinería, una de las más antiguas de Rusia, alcanzó en 2023 una capacidad de procesamiento de 4,8 millones de toneladas de crudo y suministra combustible directamente a las fuerzas armadas rusas.
Simultáneamente, las Fuerzas de Defensa de Ucrania destruyeron infraestructura logística rusa en zonas temporalmente ocupadas de Lugansk, incluyendo un depósito de suministros en Rozkishne y material de combustible en tránsito en Dovzhansk. Según el parte militar ucraniano, estas acciones buscan debilitar la base logística y militar rusa en el territorio ocupado.

El Estado Mayor General ucraniano confirmó además que, la noche del 1 de noviembre de 2025, unidades de Ucrania provocaron daños por incendio en la refinería de petróleo RN-Tuapse, ubicada en Krasnodar. La acción afectó especialmente la infraestructura de carga de petróleo del puerto marítimo comercial de Tuapsé, en la costa del Mar Negro, considerado uno de los terminales portuarios más grandes e importantes de Rusia para la logística energética.
En su comunicado, el Estado Mayor subrayó que la campaña de ataques sobre objetivos energéticos y logísticos rusos tiene como finalidad reducir el potencial militar y económico del adversario, con el objetivo de limitar o detener la agresión rusa contra Ucrania. Las autoridades ucranianas aseguraron que estas operaciones continuarán mientras Rusia mantenga la capacidad de financiar y sostener acciones militares en suelo ucraniano.

Hasta el momento, no se reportaron víctimas, aunque sí se confirmaron daños significativos en la refinería de Saratov, en el puerto de Tuapse y en las instalaciones logísticas de Lugansk. Las Fuerzas Armadas de Ucrania reafirmaron su compromiso de continuar atacando elementos críticos de la infraestructura militar-industrial rusa para contrarrestar la ofensiva de Moscú.
Cinco ataques con drones ucranianos impactaron tanto un terminal petrolero como un buque en el puerto de Tuapsé, según reportó Reuters. El portavoz de la Marina ucraniana, Dmytro Pletenchuk, afirmó el 2 de noviembre que los efectos podrían ser duraderos para Rusia, afectando las cadenas logísticas marítimas y elevando las primas de seguro de las empresas que operan en la zona, lo que podría disuadir la llegada de navieras al puerto.
Medios rusos y organismos de emergencia de Krasnodar Krai confirmaron daños en la infraestructura portuaria, incluyendo el casco de una embarcación y varios edificios, sin reportarse víctimas. Un representante del SBU declaró a Kyiv Independent que los ataques continuarán con el fin de restringir los recursos energéticos utilizados en la ofensiva rusa, en el marco de una estrategia más amplia para reducir la capacidad de financiación bélica de Moscú mediante el debilitamiento de su sector energético.








