En una escalada que eleva al máximo la tensión en Medio Oriente, la televisión estatal iraní informó este lunes por la noche que las fuerzas de la República Islámica llevaron a cabo un ataque “exitoso” contra la base aérea de Al Udeid, en Qatar, y otras instalaciones militares estadounidenses en Irak. Según Teherán, la ofensiva es una represalia directa por los recientes bombardeos de Estados Unidos sobre sus instalaciones nucleares.
El anuncio llegó apenas minutos después de que la Autoridad de Aviación Civil de Qatar decidiera cerrar su espacio aéreo “por razones de seguridad” y ordenara el desvío inmediato de vuelos comerciales. En la ciudad costera de Lusail, testigos reportaron al menos tres explosiones, avistamientos de estelas en el cielo y la activación de sirenas en zonas céntricas, mientras columnas de vehículos militares avanzaban hacia el área de la base.
Aunque los medios iraníes difundieron imágenes de archivo de misiles, no se especificaron detalles sobre el tipo de armamento utilizado ni la cantidad de proyectiles lanzados. La operación fue presentada como “una firme respuesta al acto de agresión norteamericano”.
Una crisis que no deja de escalar
El conflicto se ha intensificado rápidamente desde el 13 de junio, cuando Israel lanzó la denominada “Operación Espada de David” contra objetivos nucleares iraníes. Días después, Estados Unidos se sumó con la “Operación Martillo de Medianoche”, bombardeando sitios clave como Fordo, Natanz e Isfahán. En respuesta, el 22 de junio Irán atacó Tel Aviv con una andanada de misiles y prometió más represalias. La situación alcanzó un nuevo nivel con los presuntos ataques de hoy contra objetivos estadounidenses.
Preocupación global y advertencias internacionales
Desde Moscú, el Kremlin advirtió que las acciones estadounidenses representan un duro golpe al régimen internacional de no proliferación nuclear. Dmitry Peskov, portavoz oficial, cuestionó el impacto que estos ataques podrían tener sobre la credibilidad del Tratado de No Proliferación y el rol del Organismo Internacional de Energía Atómica.
“El ataque a territorio iraní sacude profundamente los mecanismos internacionales de control nuclear”, sostuvo Peskov, y remarcó que “la comunidad internacional deberá responder con responsabilidad”.
Reino Unido toma distancia
Una reciente encuesta de YouGov en el Reino Unido reveló que el 59 % de la población prefiere que su gobierno se mantenga al margen del conflicto, aun si eso deteriora sus vínculos con Washington. Solo el 13 % considera que es prioritario apoyar a Estados Unidos en este escenario.
El ministro británico de las Fuerzas Armadas, Luke Pollard, negó cualquier implicación del Reino Unido en las operaciones contra Irán. “No participamos ni en las acciones militares de Estados Unidos ni en los ataques israelíes”, aclaró en declaraciones a Sky News.
Pakistán pide diálogo y alerta sobre una guerra regional
En Islamabad, el Comité de Seguridad Nacional de Pakistán, presidido por el primer ministro Shehbaz Sharif, expresó su preocupación por el agravamiento del conflicto. En un comunicado oficial, el gobierno advirtió que las hostilidades actuales podrían desatar un conflicto regional de gran escala y erosionar cualquier posibilidad de negociación.
“La paz en Medio Oriente está en juego”, advirtió el CSN, instando a todas las partes involucradas a priorizar la vía diplomática y respetar el derecho internacional.