La Unión Tranviarios Automotor (UTA) ratificó el paro nacional de colectivos previsto para el martes 6 de mayo, tras considerar insuficiente la oferta salarial de las cámaras empresarias y ante la falta de avances en las negociaciones con el Gobierno nacional. La medida afectará los servicios de corta y media distancia en todo el país desde las 00:00.
El secretario gremial del sindicato, Gabriel Gusso, confirmó que “el paro está confirmado” a pesar de la reunión convocada para la tarde del lunes con la Secretaría de Trabajo, encabezada por Julio Cordero. Según indicó, no hay expectativas de una solución, ya que el Ejecutivo insiste en homologar paritarias con un tope del 1% de inflación, una postura que el gremio considera inaceptable.
“Estamos habilitados para hacer el paro. No hay intención de mejorar la propuesta y ya venció el período de conciliación obligatoria”, expresó Gusso. Además, denunció la inacción de algunas cámaras empresarias, como la CETUBA, cuyos representantes “ni siquiera se presentan a las paritarias”.
Durante el proceso de negociación, las cámaras del transporte (FATAP, AAETA, CEAP, CETUBA, CTPBA y CEUTUPBA) ofrecieron tres sumas no remunerativas: $40.000 a pagarse el 26 de mayo, $50.000 el 16 de junio y $70.000 el 15 de julio. Sin embargo, la UTA rechazó el ofrecimiento por considerarlo insuficiente y reiteró su reclamo de un salario básico de $1.700.000.
En un comunicado oficial, el gremio calificó la propuesta empresarial como “una falta de respeto” y aclaró que el aumento salarial real ofrecido no supera el 6% por cinco meses trabajados. “Se ha agotado el periodo de Conciliación Laboral Obligatoria y se resolvió un paro de actividades por 24 horas”, explicó la organización.
Desde la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), el titular Luciano Fusaro señaló que la oferta se hizo “en línea con el congelamiento de tarifas que ya lleva ocho meses”, y responsabilizó al Gobierno por no contemplar partidas presupuestarias para actualizar el esquema de subsidios.
La medida de fuerza promete tener fuerte impacto en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) y otras regiones del país, complicando el traslado de millones de pasajeros. Las partes aún no descartan un nuevo intento de negociación, pero el conflicto salarial en el transporte sigue sin solución a la vista.