En una jornada cargada de emoción y expectativa, el Vaticano fue escenario de un momento histórico: este jueves 8 de mayo de 2025, a las 18:07 (hora local de Roma), la tradicional fumata blanca surgió de la chimenea de la Capilla Sixtina, señal inequívoca de que los cardenales reunidos en cónclave han elegido a un nuevo Papa.
Más de 133 cardenales participaron en la votación secreta, que requiere alcanzar los dos tercios de los sufragios para consagrar al nuevo Sumo Pontífice. La fumata blanca fue recibida con júbilo por miles de fieles y turistas que colmaban la Plaza San Pedro, expectantes por el anuncio oficial.
Hasta el momento, el nombre del nuevo Papa y el título que adoptará para su pontificado permanecen en reserva. Según marca el protocolo vaticano, en breve el Cardenal Protodiácono aparecerá en el balcón central de la Basílica de San Pedro para pronunciar el tradicional “Habemus Papam”, presentando así al mundo la figura del nuevo líder espiritual de la Iglesia Católica.
Este cónclave se llevó adelante tras el fallecimiento del Papa Francisco, y la elección del nuevo pontífice marca el inicio de una nueva etapa para el Vaticano. La comunidad internacional sigue con atención cada paso, ansiosa por conocer no solo el nombre y origen del nuevo Papa, sino también el perfil doctrinal que imprimirá a su pontificado.
La emoción crece en Roma mientras el reloj avanza hacia uno de los momentos más solemnes y esperados de la historia reciente de la Iglesia.