En un encendido acto en Paso de los Libres, Cristina Fernández de Kirchner volvió a escena con un mensaje político contundente, en el que combinó apoyo al candidato local Martín “Tincho” Ascúa, fuertes críticas al Gobierno de Javier Milei, advertencias sobre la crisis económica, y una nueva denuncia de persecución judicial tras su postulación como legisladora bonaerense.
“Esto no está para genios ni salvadores. Si no para quienes creen en lo colectivo”, sostuvo CFK, quien además señaló que “nos han bombardeado, fusilado y desaparecido. Me gatillaron en la cara porque me quieren presa o muerta”.

Cristina Kirchner cuestionó duramente el modelo económico actual y lo comparó con experiencias neoliberales del pasado: “Este proyecto político no tiene plan económico. Es una remake de la tablita de Martínez de Hoz o la convertibilidad de Cavallo. Como el yogur: no trae fecha en la tapa, pero se vence”.
También apuntó contra los recortes en áreas clave del Estado y defendió la inversión pública:
“No se hace un país cerrando el CONICET, diciendo que si sos médico para qué estudiaste si ganás poco, ni cerrando el Garrahan. Hay que repensar un Estado más eficiente, no destruirlo”.
En tono más personal, se refirió a la situación de las personas con discapacidad y a la salud pública: “¿Cómo se puede ser tan hdp de decir que tener un hijo discapacitado es culpa del Estado? Energúmenos y bestias”.

Candidatura y judicialización
Cristina vinculó el anuncio de su candidatura con la ofensiva judicial en su contra:
Salió el anuncio de mi candidatura y se desataron los demonios. Piden por todos lados que me metan presa”.
Y lanzó una ironía: “Si estoy tan acabada, ¿por qué no me dejan competir y me derrotan políticamente? Dale. Mirá como tiemblo”.
También criticó a los medios y a sectores del propio peronismo: “Se solazan con si me van a llevar en patrullero. En el fondo, los que tienen miedo son ellos. El poder económico es más inteligente que algunos dirigentes de nuestro espacio. No tropieza dos veces con la misma piedra”.
En tono emotivo, CFK recordó los años de gestión kirchnerista: “La gente vivía en un país mejor, no en Disney. Era feliz. No nos van a borrar la memoria”.
Cerró su discurso con una alusión al caso del niño desaparecido: “No está bueno vivir en una provincia donde se roban a un pibe. Hay que construir una Corrientes mejor. Nadie se salva solo, todos necesitamos del otro”.