El presidente Javier Milei volvió a pronunciarse en clave electoral y defendió con firmeza el modelo económico implementado por su gobierno. Sus declaraciones se produjeron durante la presentación del libro Cambia la Música, del economista Salvador Di Stefano, en un acto público desarrollado este martes.
Durante la presentación, Milei centró gran parte de su intervención en los aspectos técnicos del libro de Di Stefano y, al final, se refirió a los logros de sus primeros meses de gestión y a los desafíos que enfrenta su administración. En ese marco, envió un mensaje directo de cara a las elecciones de octubre: “Espero que en las elecciones los argentinos elijan por la libertad, la esperanza, el futuro que va a hacer grande a la Argentina nuevamente y no volver al pasado, que voten por su propio bien, lo otro lo probamos y ya falló”, afirmó.
El mandatario reiteró la relevancia de los comicios legislativos del 26 de octubre como un respaldo ciudadano a su proyecto, con el objetivo de reducir la inestabilidad que los mercados evidenciaron en semanas recientes.
Frente a un público conformado por referentes económicos, empresarios y seguidores de su gobierno, Milei presentó un diagnóstico crítico sobre la situación heredada y cuestionó a la oposición. Destacó los desafíos para consolidar las reformas económicas y el costo social de los cambios implementados en los primeros meses. “Arreglar esto no es fácil, cuesta sacrificio, dolor, con los orcos rompiendo todo. Hay que terminar de cruzar el río y entrar en el sendero que haga Argentina grande nuevamente”, sostuvo.

El presidente también defendió los ejes centrales de su gestión: la baja de la inflación, la eliminación de regulaciones y la reducción de impuestos en sectores estratégicos. “Bajamos la inflación, quitamos regulaciones, bajamos 2,5 puntos del PBI de impuestos. En el sector agropecuario sacamos 43 elementos que les jodían la vida. ¿Está completa la tarea? No, falta un montón, pero lo importante es que estamos yendo en la dirección correcta”, señaló.
Milei enfatizó la necesidad de mantener la continuidad de las políticas para superar años de decadencia. “Falta, pero vamos por la dirección correcta. Estamos a mitad de camino”, aseguró, y advirtió sobre la oposición que, según dijo, obstaculiza las iniciativas de su gobierno. “Tenemos un Congreso que por una mayoría circunstancial está torpedeando al gobierno. Eso genera riesgo país, y una situación en la que los mercados no están trabajando como debieran. Pero tenemos confianza en que los argentinos van a votar y no van a querer volver al pasado”, agregó.
Finalmente, el jefe de Estado reafirmó que la dirección económica de su administración es la correcta, resaltando la baja de la inflación y los recortes impositivos como indicadores de progreso. También destacó los beneficios alcanzados en el sector rural y manifestó su expectativa de que, siguiendo estas políticas, Argentina podría alcanzar niveles de desarrollo comparables a España en 10 años, Alemania en 20 y Estados Unidos en 30, según sus proyecciones.








