El presidente Javier Milei encabezó una cumbre con 20 gobernadores para debatir el Presupuesto 2026 y las próximas reformas estructurales de su gestión. Luego del encuentro, calificó la reunión como “extremadamente positiva” y remarcó que, pese a algunas diferencias, se alcanzó un entendimiento sobre las prioridades del país. “Hemos logrado estar de acuerdo con matices sobre lo que necesita la Argentina en esta etapa”, sostuvo, y destacó que el gesto de los mandatarios provinciales refleja la voluntad de acompañar el cambio que la sociedad eligió en las urnas.
En diálogo con A24, Milei señaló que el diálogo político es viable siempre que se eviten los errores del pasado. “No podemos juntarnos con gente que dos más dos no les da cuatro”, dijo, aludiendo a sectores con los que considera imposible un intercambio racional.
Uno de los temas centrales fue la reforma laboral, sobre la cual aseguró que existe “consenso absoluto”. El mandatario argumentó que el actual marco normativo es “anacrónico” y que su reforma busca formalizar a los trabajadores informales. “Cuando la mitad de los trabajadores están en negro, algo no está funcionando. Los propios sindicalistas lo admiten”, afirmó. Explicó que la propuesta no afecta los derechos vigentes, sino que apunta a facilitar la inserción de jóvenes y nuevos empleados: “Quienes están dentro del sistema mantienen sus condiciones; el cambio es para los que ingresan”.
Durante la reunión también se abordaron temas fiscales. Milei sostuvo que el Presupuesto base cero y el equilibrio fiscal cuentan con un acuerdo generalizado y propuso avanzar hacia un esquema en el que “quien gasta sea el mismo que recauda”, aunque descartó una discusión inmediata sobre la coparticipación federal.
El jefe de Estado se refirió luego a los resultados electorales y consideró que “la derrota del 7 de septiembre fue una bendición”. Según explicó, esa experiencia lo obligó a revisar estrategias y fortalecer su gestión: “Nos llevó a repensar muchas cosas y lo plasmamos en el resultado del 26 de octubre. El aprendizaje en estos dos meses fue enorme”.
Definido como un “bilardista a ultranza”, Milei aseguró que cumplió sus promesas antes de llegar a los dos años de mandato. Atribuyó el avance de las reformas de segunda generación a la primera etapa de ajuste, conocida como “la motosierra”, cuyo objetivo fue equilibrar las cuentas públicas.
“El sentido de la motosierra era alcanzar el equilibrio fiscal”, explicó, y subrayó que su administración lo consiguió en apenas un mes, mientras otros gobiernos tardaron años. Agregó que la reducción del déficit permitió contener la emisión monetaria y, por ende, frenar la inflación, que prevé resolver hacia mediados de 2025.
Milei destacó además la libertad de elección de moneda vigente en el país y afirmó que las condiciones macroeconómicas acompañan el fortalecimiento del peso: “Hoy existe competencia de monedas; si los argentinos quieren usar el dólar, pueden hacerlo”, aseguró.
En su repaso económico, informó que el PBI cayó un 1,8%, pero que a fines de 2024 la actividad se ubicó 6,6% por encima del año previo. Señaló una recuperación en el primer trimestre, aunque atribuyó los retrocesos posteriores a la “introducción de 40 leyes contra el plan económico”, lo que —dijo— elevó el riesgo país y encareció el financiamiento.
El mandatario valoró el esfuerzo de las provincias en la reducción del gasto público, que cayó 31,8%, mientras que los gobiernos locales ajustaron en más de tres puntos del producto bruto. También diferenció su gestión de la oposición, a la que acusó de intentar alterar el rumbo económico: “El 76% de los argentinos no quiere volver al kirchnerismo”, enfatizó.
Consultado sobre posibles cambios en el Gabinete, Milei fue cauto: “Haré los ajustes cuando sean necesarios. Necesito funcionarios que puedan ser interlocutores válidos ante el Congreso y los gobernadores”. No descartó el ingreso de Santiago Caputo, a quien definió como “su principal asesor” y elogió por su trabajo “artesanal”. También confirmó que Martín Menem continuará al frente de la Cámara de Diputados.
En otro tramo, anticipó un encuentro con Mauricio Macri. “Siempre se acercó con generosidad y me aportó su experiencia. Esta es la etapa del crecimiento, voy a hablar con él”, dijo, y no descartó incorporar dirigentes del PRO: “En la lógica bilardista, ganar es lo único que importa. Lo único que importa es cumplir con mi trabajo”.
Milei también se refirió al apoyo de Estados Unidos antes de las elecciones legislativas y elogió al expresidente Donald Trump: “Trump es Gardel con guitarra eléctrica. Puede jugar a la mancha con los aviones”.
Por último, confirmó que Patricia Bullrich y Luis Petri participarán como asesores en la definición de los próximos ministros de Seguridad y Defensa, y descartó nuevos cargos para Karina Milei. Además, anunció que planea viajar a dos provincias por mes y realizar reuniones de gabinete en el interior del país.
“La construcción de la Argentina no depende de una sola persona”, concluyó el Presidente, al remarcar que su objetivo es sumar a todos los sectores que coincidan con el rumbo del Gobierno para “lograr mejores leyes y consolidar el cambio”.








