Italia comenzará a aplicar un nuevo sistema de acceso pago para uno de sus sitios más icónicos. A partir del 1 de febrero, los turistas que quieran acercarse a la Fontana di Trevi, en Roma, deberán abonar una entrada de dos euros. La decisión, anunciada este viernes por las autoridades locales, busca ordenar la enorme afluencia de visitantes que recibe diariamente el monumento barroco, uno de los puntos más concurridos de la capital italiana.
Si bien la fuente continuará siendo visible de manera gratuita desde cierta distancia, el acceso más cercano quedará limitado exclusivamente a quienes cuenten con una entrada. De esta forma, se intenta reducir el impacto del turismo masivo sin impedir que el público pueda apreciar el sitio.
“A partir del 1 de febrero introducimos un billete de pago para seis sitios”, explicó el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, durante una conferencia de prensa. Además, precisó que el ingreso a los otros cinco lugares incluidos en la medida tendrá un costo de cinco euros.
La Fontana di Trevi, famosa en todo el mundo por su aparición en la película La Dolce Vita, de Federico Fellini, recibe cada día a miles de personas que se acercan a lanzar monedas al agua y pedir deseos. Esa tradición genera una recaudación semanal de miles de euros, que actualmente se destinan a la organización benéfica Cáritas.
Según datos oficiales, entre el 1 de enero y el 8 de diciembre de este año, cerca de nueve millones de visitantes accedieron al área próxima a la fuente, lo que representa un promedio de 30.000 personas por día. Gualtieri señaló que el lugar también suele ser blanco de carteristas y que el ayuntamiento debate desde hace años distintas alternativas para regular el acceso. En ese sentido, advirtió que la masiva presencia de turistas genera un “embotellamiento” producto del “ya conocido problema del turismo excesivo”.
La decisión provocó opiniones encontradas entre los visitantes internacionales. Una turista procedente del Golfo consideró que el acceso “debería ser gratis” mientras hacía fila junto a su hija, mientras que un visitante de Corea del Sur aseguró que tendría que pensarlo antes de volver una vez que se implemente el cobro.
El nuevo sistema de acceso podría generar unos 6,5 millones de euros anuales, según estimaciones oficiales. No se trata de una medida inédita en el país: el Panteón comenzó a cobrar entrada en 2023 y Venecia instauró recientemente una tasa turística durante los períodos de mayor concurrencia.
Las autoridades aclararon que los residentes de Roma mantendrán el acceso gratuito a la Fontana di Trevi. Las entradas podrán comprarse en línea o directamente en el lugar mediante tarjetas y otros medios de pago, y se habilitarán filas diferenciadas para quienes ya cuenten con su ticket y para quienes lo adquieran en el momento.
