El hallazgo de un arma de fuego cargada en un colectivo del centro de la ciudad de Rosario activó este sábado un operativo policial y abrió una investigación judicial. Luego de que fuera analizada, lograron identificar a su dueño, quien se trataría de un inspector de la Policía de Investigaciones.
La secuencia se inició cuando un pasajero advirtió al chofer de la línea 131 sobre la presencia de una pistola en uno de los asientos. Según informó la división Tercio Charly del Comando Radioeléctrico, esta se encontraba cerca de una de las escaleras de descenso.
Frente a esto, el conductor detuvo el vehículo en la intersección de San Luis y Paraguay para verificar la situación y solicitó la intervención de efectivos policiales que patrullaban la zona. Después de que los agentes constataran la existencia del arma, notificaron de inmediato al 911.
De acuerdo a la información publicada, la pistola encontrada resultó ser una semiautomática Taurus de nueve milímetros. De la misma manera, confirmaron que estaba equipada con un cargador y tenía 17 cartuchos intactos en su interior.
Posteriormente, desde la central policial se logró identificar al propietario del arma: un inspector de la Policía de Investigaciones. Al presentarse en la unidad de transporte, el funcionario reconoció que la pistola le pertenecía y explicó que probablemente se le habría caído de la pistolera muslera.
A pesar de esto, el caso quedó bajo la órbita de la Fiscalía en turno, que dispuso el secuestro del arma como parte de la causa en curso. Asimismo, no se habría tomado ningún tipo de temperamento respecto al accionar del oficial señalado.
En paralelo, la Policía de Santa Fe informó que durante una serie de patrullajes preventivos en distintos puntos de la capital provincial se secuestraron cuatro armas de fuego, municiones y se detuvo a cuatro personas, quienes quedaron a disposición de la Justicia tras ser trasladados a dependencias policiales.
El primer procedimiento se realizó el viernes en Gdor. Vera al 4200, cuando una patrulla detectó a dos hombres, de 27 y 29 años, dentro de un automóvil estacionado. Al advertir la presencia policial, ambos intentaron ocultarse, lo que motivó su identificación y requisa, tanto personal como del vehículo. En el interior del auto, los agentes hallaron un revólver con cartuchos intactos, cuya tenencia y portación no pudieron ser justificadas por los ocupantes. Además, sobre la vereda, muy cerca del rodado, se encontró una pistola 9 mm con carga en su interior, que uno de los sujetos habría descartado al notar la llegada de los uniformados.
Horas después, en la zona de Espora y Padre Vieyra, otra patrulla interceptó a un hombre de 31 años que circulaba a pie. Durante la identificación, se le secuestró un revólver calibre 38 que llevaba oculto entre sus prendas. El procedimiento fue comunicado a la Unidad Fiscal y formalizado en la Seccional 8va., donde se labró el acta procesal.
La tercera intervención ocurrió en el Barrio Loyola Norte, tras una denuncia por presuntos disparos. En las inmediaciones de Fray Santa María de Oro y Misiones, los agentes lograron secuestrar una pistola calibre 22 y detener a un hombre de 31 años, presuntamente vinculado al hecho. Según el relato policial, el sospechoso habría intentado huir en moto junto a otro individuo, quien consiguió escapar, pero finalmente fue aprehendido.
Por último, el Comando Radioeléctrico de Santa Fe confirmó la incautación de una escopeta, una pistola 9 mm, una pistola calibre 22 y dos revólveres calibre 38, además de municiones, en distintos puntos de la capital. Los cuatro adultos detenidos permanecen a disposición de la Justicia, mientras las actuaciones continúan en las sedes policiales correspondientes.








