El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sostuvo este viernes que será “difícil” pedirle a Israel que detenga sus ataques aéreos contra Irán, en un contexto de creciente tensión en Medio Oriente. La declaración se produjo durante un encuentro con periodistas en Nueva Jersey, donde participó de un evento de recaudación de fondos en su campo de golf.
“Será difícil decirles que paren”, afirmó Trump al ser consultado sobre la posibilidad de presionar a Israel para que cese las ofensivas militares. Al mismo tiempo, desestimó los intentos diplomáticos de los países europeos para mediar en el conflicto. “Europa no va a poder ayudar en esto. Irán no quiere hablar con Europa. Quiere hablar con nosotros”, sentenció.
Las palabras del mandatario reflejaron un escepticismo marcado respecto al papel que pueden jugar los aliados occidentales en una eventual solución diplomática. En ese sentido, la vocera del Departamento de Estado, Tammy Bruce, también evitó comprometerse con una estrategia clara hacia un alto el fuego.
“No voy a calificar lo que está ocurriendo en este momento, ni la reacción del presidente o del secretario de Estado ante lo que esas negociaciones podrían ser”, afirmó Bruce en una conferencia de prensa.
Las declaraciones se produjeron mientras continúan los bombardeos israelíes en territorio iraní y crece la preocupación internacional por una posible escalada mayor entre ambos países, que mantienen una larga historia de tensiones geopolíticas.