El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este sábado que ordenó el despido de Erika McEntarfer, comisionada de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés). La acusó públicamente de haber manipulado los datos de empleo para favorecer a la exvicepresidenta Kamala Harris en el marco del proceso electoral.
“Me acaban de informar que las cifras sobre empleo están siendo elaboradas por alguien nombrada por Biden, la doctora Erika McEntarfer, comisionada de Estadísticas Laborales, quien falsificó los números antes de la elección para impulsar las posibilidades de Kamala”, escribió Trump en su red Truth Social.
En su mensaje, Trump agregó: “Necesitamos cifras precisas sobre el empleo. Ordené a mi equipo que despida a esta nominada política de Biden de inmediato. Estas estadísticas deben ser justas y no manipuladas”.
El anuncio se conoció poco después de la publicación del último informe mensual de empleo por parte del BLS, correspondiente a julio. El reporte señaló que sólo se crearon 73.000 empleos no agrícolas, muy por debajo de las proyecciones, y además se corrigieron a la baja más de 250.000 puestos generados en mayo y junio combinados.
McEntarfer había sido elegida para el cargo por el expresidente Joe Biden en julio de 2023 y confirmada por el Senado en enero de 2024, en una votación que contó con apoyo de ambos partidos.
Para el economista Gary Hufbauer, del Instituto Peterson de Economía Internacional, la decisión de Trump “es, simple y llanamente, un despido político. No hay fundamentos vinculados al desempeño ni a las capacidades técnicas”.
“El personal de BLS probablemente resistirá una interferencia masiva en la recolección y presentación de datos. Sin embargo, alguien designado por Trump podría inclinar la información en su favor”, advirtió Hufbauer.