Claudio Poggi logró una contundente victoria en las elecciones legislativas de San Luis, consolidando su liderazgo en la provincia y allanando el camino para impulsar las reformas que proyecta para 2026. El frente oficialista Ahora San Luis obtuvo el 47% de los votos, superando por 20 puntos al Frente Justicialista, el espacio encabezado por el exgobernador Alberto Rodríguez Saá.
En estos comicios se renovaban 22 de las 43 bancas de la Cámara de Diputados provincial y 4 de los 9 escaños del Senado. Poggi logró colocar 12 nuevos diputados y se quedó con todas las bancas de senadores en disputa, un triunfo que le permitirá alcanzar una mayoría calificada para avanzar en su agenda legislativa.
El distrito de Pueyrredón, donde se concentra la mitad del electorado de San Luis, resultó clave: la fuerza de Poggi se impuso por 17 puntos, asegurando 6 bancas solo en ese territorio. Además, la alianza oficialista conquistó ocho de las nueve intendencias en juego y la mayoría de los concejos municipales.
“Este resultado refleja el respaldo de los sanluiseños al cambio que comenzó en diciembre de 2023”, destacó Poggi en conferencia de prensa tras conocerse los resultados provisorios. El gobernador ya trabaja en una ambiciosa reforma constitucional, que busca modernizar una Carta Magna que data de hace más de 40 años, durante el largo dominio político de los Rodríguez Saá.
Entre los ejes que impulsa están la austeridad estatal y la actualización del funcionamiento institucional, en línea con las políticas de la Casa Rosada. De hecho, el buen diálogo entre Poggi y el gobierno nacional se vio reflejado en las elecciones: La Libertad Avanza no presentó lista propia en San Luis, y aunque sectores libertarios participaron a través de otras fuerzas menores, no lograron opacar el avance oficialista.
Desde el entorno de Poggi reconocen conversaciones abiertas con el presidente Javier Milei de cara a las elecciones nacionales de octubre. “Hay buena predisposición, pero todavía falta definir detalles”, admitió el mandatario provincial, quien aparece como un socio estratégico para el oficialismo nacional, sin resignar los intereses puntanos.
Mientras tanto, en el peronismo local, el balance fue moderadamente optimista pese a la derrota. “Competimos desde la militancia, sin recursos”, señalaron voceros justicialistas. Sin embargo, en el oficialismo puntano consideran que Poggi se consolidó como el principal jefe político de San Luis y advierten que el peronismo, debilitado y sin un líder claro para 2027, enfrenta un futuro incierto.
Aunque la elección fue eminentemente provincial, la contundencia del triunfo de Poggi reconfigura el mapa político local y tiene impacto en el escenario nacional, donde las alianzas comienzan a delinearse rumbo a octubre.