El presidente de Rusia, Vladímir Putin, recibió detalles sobre los contactos recientes entre representantes del Kremlin y enviados del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con el objetivo de explorar posibles caminos hacia un acuerdo de paz en Ucrania. La información fue confirmada este miércoles por el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, en declaraciones a la prensa citadas por medios rusos y ucranianos.
Según explicó Peskov, el diálogo se inscribe en los esfuerzos por encontrar una solución al conflicto que enfrenta a Moscú y Kiev desde 2022, con una participación activa de Washington como mediador. En ese marco, el enviado ruso Kirill Dmitriev ya presentó a Putin un informe completo tras su reciente viaje a Miami, donde mantuvo reuniones con emisarios estadounidenses y ucranianos.
El vocero presidencial señaló que, a partir de los datos recibidos, el Kremlin “formulará su postura y retomará los contactos en el futuro cercano a través de los canales que ya están en funcionamiento”. No obstante, remarcó que no corresponde difundir públicamente el contenido de los documentos traídos desde Miami ni la reacción de Rusia, y subrayó que este tipo de intercambios no se comunicará a través de los medios.
En la última semana, Putin reiteró que las condiciones rusas para avanzar hacia la paz incluyen que Ucrania ceda cerca de 5.000 kilómetros cuadrados del Donbas que aún están bajo control de Kiev y que renuncie de manera oficial a su aspiración de ingresar en la OTAN. Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, indicó que las delegaciones de Ucrania y Estados Unidos avanzaron en la redacción de un plan de 20 puntos durante las conversaciones en Miami, aunque persistieron diferencias en temas clave como las cesiones territoriales y el futuro de la central nuclear de Zaporizhzhia, actualmente bajo control ruso.
Zelensky detalló que el plan contempla un pacto de no agresión supervisado por un mecanismo internacional y prevé garantías de seguridad para Ucrania, entre ellas el mantenimiento de un ejército de 800.000 efectivos y compromisos vinculantes para que Estados Unidos y otros aliados brinden una defensa equivalente al Artículo 5 de la OTAN. Uno de los principales focos de conflicto sigue siendo la exigencia rusa de concesiones territoriales en el Donbas. Mientras Kiev propone congelar la actual línea del frente, otra alternativa en análisis incluye la creación de zonas económicas especiales bajo administración ucraniana, con presencia de fuerzas internacionales y la posibilidad de un referendo en el futuro.
El mandatario ucraniano también remarcó que el ingreso de Ucrania a la OTAN no forma parte del plan actual, aunque aclaró que el país mantiene esa aspiración, pese a que la Alianza Atlántica no prevé admitir a Kiev en el corto plazo.
El encuentro en Miami, en el que participaron representantes de la Casa Blanca como Steve Witkoff y Jared Kushner, además de enviados ucranianos y europeos, fue previo a la comunicación de Dmitriev con Putin. Tras esa reunión, el propio Dmitriev anunció en la red social X que el próximo encuentro entre delegaciones de Rusia y Estados Unidos se llevará a cabo en Moscú.
Finalmente, Zelensky reiteró que la cuestión de la adhesión de Ucrania a la OTAN no está incluida entre los 20 puntos del plan, ya que considera que esa decisión depende exclusivamente de los miembros de la Alianza, quienes por el momento no contemplan la incorporación de su país. Aunque Ucrania no renuncia a esa meta, el presidente admitió que ve poco probable que se concrete en el futuro cercano.
