Policía usó una Taser para detener a un hombre que disparaba desde un balcón en Boedo

Un ciudadano chino de 39 años fue reducido por la Policía de la Ciudad tras efectuar disparos desde el balcón de su vivienda en Las Casas al 4100. El operativo incluyó negociadores, equipos médicos y el uso de una pistola Taser. Fue trasladado al Hospital Peña por “excitación psicomotriz”.

Policía redujo con una Taser a un hombre que disparaba desde un balcón en Boedo.Foto de la Detención.

En un operativo que alteró la tranquilidad de Boedo, la Policía de la Ciudad detuvo a un hombre de 39 años y nacionalidad china, quien realizaba disparos desde el balcón de su vivienda en la calle Las Casas al 4100, indicaron fuentes policiales.

Según informaron, los agentes emplearon una pistola Taser para inmovilizar al sospechoso, logrando reducirlo sin provocar lesiones. El incidente comenzó cuando una patrulla de la Comisaría Vecinal 5 B acudió tras recibir un llamado al 911 por detonaciones.

Al llegar, los efectivos observaron que el hombre disparaba con un pistolón desde el balcón y no accedía a comunicarse con las autoridades. Ante esta actitud, se montó un perímetro de seguridad en la cuadra, se desvió el tránsito y se notificó al sistema judicial.

El personal del Departamento de Operaciones Especiales Metropolitanas (DOEM) intervino tras una orden judicial. A la escena también arribó un negociador, acompañado de equipos médicos del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME), preparados para cualquier contingencia.

Al no prosperar el diálogo y frente a la hostilidad del implicado, los efectivos ingresaron al domicilio utilizando la pistola Taser como medida de control, según detallaron las fuentes.

Una vez reducido, el SAME asistió al hombre, quien fue trasladado al Hospital Peña con diagnóstico de “excitación psicomotriz”. Dentro de la vivienda se hallaron diversas armas y municiones: un revólver largo, un pistolón, una pistola de aire comprimido, un cargador de pistola semiautomática y ocho vainas servidas calibre 9 milímetros, lo que evidenció el riesgo del episodio.

La investigación judicial fue caratulada como “abuso de armas”, mientras se intentan esclarecer las motivaciones del hombre, cuya identidad no fue revelada. La intervención policial permitió asegurar la zona y evitar heridos adicionales, tanto dentro del edificio como entre los transeúntes.

De acuerdo con los procedimientos de la Justicia porteña, el uso de la pistola Taser se aplicó como acción táctica para prevenir un desenlace violento y asegurar la detención del acusado, quien quedó a disposición judicial tras su evaluación médica.

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