Morón sigue siendo escenario de intensas movidas políticas que mantienen en vilo a los actores locales y nacionales. La semana comenzó con la visita al distrito de Nicolás Trotta, reconocido ministro “albertista”, quien compartió agenda con Martín Sabbatella, líder de Nuevo Encuentro. Este encuentro parecía inicializar una serie de señales políticas que, con el correr de los días, se transformaron en hechos concretos.
El martes por la mañana, el Concejo Deliberante de Morón recibió dos notas que marcaron un giro inesperado en la política local. En la primera, Valeria Gasol informó al presidente del HCD que concluía su licencia y asumiría la banca que hasta ese momento ocupaba Nadia Diz. Desde el entorno de Máximo Kirchner se valoró positivamente la incorporación de Gasol, reconocida militante camporista, considerando su llegada como un fortalecimiento del espacio.
Sin embargo, la situación dio un giro digno de una serie política. Apenas unas horas más tarde, Florencia De Luca también notificó que dejaba sin efecto su licencia y asumiría la banca para la cual había sido electa en 2023. Esta decisión fue interpretada por algunos sectores como un mensaje directo tanto hacia Cristina Fernández de Kirchner como hacia Fuerza Patria, y abrió un nuevo capítulo en la interna de Nuevo Encuentro.
En apenas 48 horas, el partido mostró una doble movida que, según fuentes del entorno de Sabbatella, busca demostrar fuerza ante los distintos sectores del peronismo y de La Cámpora. Desde el espacio político aseguran que “Martín está mostrando los dientes”, en una clara advertencia sobre su rol en el distrito.
Ahora queda por verse cómo reaccionará Cristina Fernández de Kirchner ante estos movimientos, especialmente con la cercanía del “Día de la Lealtad” y a pocos días de las elecciones del próximo domingo. Más allá del corto plazo, estos cambios también podrían tener un impacto en la estrategia electoral hacia 2027, consolidando la posición de Sabbatella y Nuevo Encuentro dentro de la política local y nacional.
