Un incendio en una vivienda del barrio Jorge Newbery de Mar del Plata generó conmoción durante la tarde del martes y desató una cadena de reacciones, luego de que un grupo de padres de alumnos de la Escuela Primaria N°21 prendiera fuego a la casa donde vivía un niño de 10 años acusado de haber manoseado a dos compañeras de curso.
El violento episodio, protagonizado por vecinos y familiares de las supuestas víctimas, se produjo tras la denuncia de abuso ocurrida dentro del ámbito escolar. La reacción no solo provocó importantes daños materiales, sino también disturbios y un clima de extrema tensión en una zona caracterizada por los descampados y las viviendas dispersas.
Desde el Consejo Escolar informaron al medio Ahora Mar del Plata que “se rompieron dos puertas, maderas, rejas, y que la escuela ahora está con custodia policial”, en referencia al establecimiento ubicado en Bolívar y Onésimo Leguizamón.
El caso del incendio quedó bajo investigación de la Unidad Fiscal de Instrucción N°5, a cargo del fiscal Alejandro Pellegrinelli, mientras que la denuncia por el presunto abuso fue asignada a la fiscal Mariana Baqueiro, del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil. Además, se dispuso la intervención de la Asesoría de Menores e Incapaces con el fin de garantizar los derechos de los niños involucrados.
La protesta se había iniciado en la tarde del martes frente a la escuela, donde se registraron roturas de vidrios y daños a patrulleros. Posteriormente, los manifestantes se dirigieron a la vivienda de la familia del acusado y allí prendieron fuego el inmueble.
Ante esta serie de hechos violentos, el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) resolvió convocar a un paro de actividades por 24 horas en todo el distrito de General Pueyrredón, como medida de rechazo a la escalada de violencia. Además, se organizó una marcha docente con la participación de trabajadores de la educación y vecinos del barrio.
Durante la noche, se registraron cortes de calles y manifestaciones espontáneas en distintos puntos de Jorge Newbery. Vecinos expresaron sorpresa y desconcierto por los incidentes y no descartaron nuevas movilizaciones durante el día.
Desde el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA) General Pueyrredón, advirtieron sobre la gravedad de los hechos y reflexionaron: “La sociedad llegó a un nivel de frustración tal que la escuela ya no alcanza a mediar. Son muchos los conflictos, todo el tiempo. La escuela es una caja de resonancia de cómo estamos viviendo. El ‘sálvese quien pueda’ o la naturalización de la violencia que incluso se replica desde el poder, valida estos estallidos”.








