El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, destacó como “positiva, cordial y productiva” la reunión que mantuvo en Casa Rosada con el designado ministro del Interior, Diego Santilli, y el jefe de Gabinete, Manuel Adorni. El encuentro formó parte de las conversaciones que impulsa la gestión libertaria con los mandatarios provinciales para analizar reformas y buscar apoyo al Presupuesto 2026.
Pese al tono conciliador, Llaryora advirtió que el proyecto presupuestario “tiene que tener determinadas modificaciones para ser aprobado”. Si bien evitó detallar cuáles deberían ser esos cambios, subrayó la necesidad de que el plan económico tenga “una visión de crecimiento”.
“Necesitamos un Presupuesto que incentive la producción, genere empleo, reduzca la presión fiscal y acompañe un proceso de baja inflación”, expresó el mandatario cordobés al retirarse de la sede gubernamental, tras casi una hora y media de reunión.
En cuanto a la reforma laboral que promueve la administración de Javier Milei, Llaryora señaló que “aún no hay ningún proyecto presentado” y manifestó preocupación por “la cantidad de personas que están en la informalidad en industrias y comercios chicos”.
“Un juicio a un pequeño empresario lo puede hacer cerrar la persiana. En una reforma no puede haber modificaciones hacia atrás, hay derechos adquiridos. Hay que tener en cuenta las diferencias entre medianos y grandes”, remarcó.
Por otra parte, el gobernador aclaró que no se abordó durante el encuentro el reclamo de Córdoba a la Nación por la deuda de la caja de jubilaciones: “No se habló, eso está en la Justicia”, dijo.
Finalmente, Llaryora valoró el cambio de tono del presidente Milei: “Veo con buenos ojos que se abra una nueva etapa que nos permita dialogar y lograr consensos para mejorar la vida de los argentinos y dejar atrás anteriores etapas de agravios e insultos”.
Antes de recibir al mandatario cordobés, Santilli y Adorni se habían reunido con el gobernador de San Juan, Marcelo Orrego, en el marco de las rondas bilaterales con jefes provinciales para construir acuerdos que faciliten la aprobación del Presupuesto y allanen el camino hacia las reformas laboral, impositiva y del Código Penal.
