La inflación en la Ciudad de Buenos Aires fue de 1,6% en mayo, según informó este lunes la Dirección General de Estadística y Censos porteña. Se trata del primer dato oficial del mes y marca una significativa desaceleración respecto del 2,3% registrado en abril, siendo además el índice mensual más bajo del año.
Con este resultado, la inflación acumulada en los primeros cinco meses de 2025 alcanza el 12,9%, mientras que la variación interanual –es decir, en comparación con mayo de 2024– fue del 48,3%.
El dato porteño funciona como un anticipo de lo que podría esperarse del índice nacional que difundirá el INDEC este jueves. Las consultoras privadas ya proyectan una inflación cercana al 2% para el mismo período, aunque el Gobierno apuesta a que se ubique por debajo de ese umbral.
Entre los rubros que más incidieron en el índice general, se destacaron Salud, con una suba del 2,9% impulsada por los aumentos en las cuotas de la medicina prepaga; Información y comunicación, que trepó 3,8% por alzas en telefonía e internet; y Alquileres y servicios de vivienda, que aumentaron 2,1%.
Por su parte, los alimentos y bebidas no alcohólicas subieron 1,2% y contribuyeron con 0,21 puntos al total del índice. Dentro de este rubro, se registraron alzas en carnes (1,7%), pan y cereales (2,1%) y lácteos (2,1%). No obstante, la caída de 4,9% en verduras, tubérculos y legumbres ayudó a moderar el aumento general.
También subieron Educación (2,4%) y Restaurantes y hoteles, por los ajustes en cuotas escolares y consumos fuera del hogar. En contrapartida, los precios estacionales mostraron una baja significativa del 3,6%, producto de menores valores en pasajes aéreos, paquetes turísticos, alojamiento y verduras.
En la desagregación por tipo de producto, los bienes subieron 0,8%, mientras que los servicios se incrementaron un 2%. El comportamiento de los servicios estuvo fuertemente influido por subas en alquileres, prepagas y gastronomía.
El informe también reveló que los precios regulados –como transporte, salud y educación– aumentaron 1,7%, mientras que el grupo denominado “resto del IPC” registró una suba del 2,1%.
Este descenso en el ritmo inflacionario porteño es observado con atención por el Gobierno Nacional, que ve en esta tendencia una señal alentadora para el índice nacional de mayo, en un contexto donde la lucha contra la inflación continúa siendo una prioridad económica.