Karina Milei se dirigió a la prensa desde el búnker de La Libertad Avanza aproximadamente una hora después de que cerraran los comicios legislativos de este domingo 26 de octubre. Junto a Martín Menem, la presidenta del partido resaltó la presencia de La Libertad Avanza en los 24 distritos del país y valoró la implementación de la Boleta Única de Papel: “Estamos muy contentos”, afirmó la Secretaria General de la Presidencia y hermana del presidente Javier Milei.
“Nosotros estamos muy contentos. Como presidente del partido, y vicepresidente (mirando a Martín Menem), La Libertad Avanza estuvo presente en todos los distritos del país”, señaló.
En relación con la Boleta Única de Papel, Milei agregó: “Estamos contentos también por la boleta única, no tuvimos ninguna queja, y ustedes saben que este es un logro de este gobierno”.
Sobre los resultados electorales, se mostró prudente: “Vamos a seguir esperando los números, aún no los tenemos”. Además, agradeció a todos los fiscales por su labor: “Les agradezco mucho a todos”, antes de regresar al interior del Hotel Libertador, sede del búnker oficialista.
Durante la jornada, el ambiente en el búnker se mantuvo entre la cautela y el optimismo. Javier Milei llegó al Hotel Libertador cerca de las 19:00 para seguir de cerca el escrutinio, acompañado por colaboradores y dirigentes clave del partido.
Karina Milei había llegado al hotel antes de las 18:00 y encabezó la mesa de campaña, acompañada por Martín Menem y los armadores bonaerense y porteña, Sebastián Pareja y Pilar Ramírez. Poco después, se sumó la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en el momento en que comenzaban a circular los primeros datos de los boca de urna.
Dentro del búnker, ubicado en la intersección de Maipú y avenida Córdoba, se encontraban dirigentes y militantes atentos a los primeros resultados. Según los datos preliminares del oficialismo, La Libertad Avanza se perfilaba como la fuerza con ventaja sobre el kirchnerismo, con una diferencia estimada de alrededor de cinco puntos porcentuales. Algunos sectores del partido incluso proyectaban alcanzar el 40% de los votos, cifra que consideraban difícil de alcanzar antes de la elección.
Desde el mismo espacio político se advirtió que estos números eran provisionales, dado que las escuelas seguían abiertas y el escrutinio no había finalizado. A pesar de ello, la expectativa crecía dentro del partido.
El análisis por provincias también arrojaba señales positivas para el oficialismo. En Córdoba, los referentes evitaron dar cifras precisas, pero reconocieron una “mucha expectativa” en torno al candidato Gonzalo Roca, cercano a Gabriel Bornoroni, jefe del bloque de La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados. En Santa Fe, el candidato libertario Agustín Pellegrini figuraba “empatado con Fuerza Patria y con Provincias Unidas más atrás”, según estimaciones internas.
En la provincia de Buenos Aires, el PRO lideraba los últimos tramos de la campaña, reduciendo a la mitad la brecha de 13 puntos registrada en septiembre frente al kirchnerismo, quedando en torno a 5 o 6 puntos porcentuales de diferencia.
En la ciudad de Buenos Aires, el oficialismo aspiraba a alcanzar el 50% de los votos. Los candidatos del PRO, encabezados por Fernando de Andreis, planeaban reunirse primero en la sede partidaria de Balcarce al 412 y luego trasladarse al Hotel Libertador. La presencia de Mauricio Macri no estaba confirmada, aunque no se descartaba tras haber retomado contacto recientemente con Milei.
