Javier Milei habló públicamente luego de la renuncia de José Luis Espert a su candidatura a diputado nacional por la provincia de Buenos Aires. En una entrevista con Luis Majul en LN+, el mandatario aclaró que la decisión no fue un desplazamiento y volvió a respaldar al economista: “El kirchnerismo es especialista en montar este tipo de operaciones. No tengo dudas de la honorabilidad del profe Espert”, afirmó.
El presidente cuestionó que se intente instalar un debate sobre presuntas irregularidades en lugar de discutir proyectos para el futuro: “En lugar de hablar de cómo hacer crecer a la Argentina, se habla de si estamos manchados o no. Es una locura viniendo de quién viene”.
Respecto a las acusaciones que derivaron en la renuncia, Milei recordó que Espert firmó contratos en el sector privado y rechazó que haya actuado fuera de la ley. “Si alguien quiere hacer algo sucio, ¿lo hace por vía bancaria? Es una barbaridad lo que se planteó”, señaló en referencia a los vínculos con Federico “Fred” Machado.
El mandatario destacó que Espert priorizó “los intereses de la Nación y de las ideas de la libertad” por encima de lo personal. “Es un gladiador, y aún así decidió dar un paso al costado porque entendió la responsabilidad histórica que tiene”, sostuvo.
En la misma entrevista, Milei ratificó que Diego Santilli será quien encabece la lista de La Libertad Avanza en Buenos Aires. “Lo consultamos y aceptó. Lo resolverá la Justicia Electoral, pero no hay problema en que sea alguien del PRO. Esto muestra la nobleza del acuerdo”, dijo. Además, anticipó que, si la oposición desplaza a Espert de la comisión de Presupuesto, propondrá a Bertie Benegas Lynch como reemplazo.
El presidente también vinculó la operación contra Espert con otras maniobras en su contra, como el caso de la criptomoneda Libra, y desestimó las acusaciones por corrupción en su gestión. En ese sentido, restó importancia a los audios del ex titular del PAMI, Diego Spagnuolo: “Se dedicó a esparcir chimentos de peluquería”.
Sobre la situación económica, Milei reiteró su optimismo: “Estoy convencido de que entre julio y agosto del año que viene la inflación desaparece en la Argentina”. Reivindicó la baja de precios, la recuperación del salario real y la salida de millones de personas de la pobreza. “No digo que la tarea esté completa, pero no hay que aflojar”, advirtió.
En el plano político, aseguró que cualquier gobernador no kirchnerista apoyará una futura reforma tributaria que, a su juicio, permitirá bajar impuestos, generar empleo y abrir la economía. También negó internas en la Casa Rosada entre Karina Milei y Santiago Caputo, y valoró su vínculo con Mauricio Macri: “En Olivos tuvimos dos horas de coincidencias y media hora de diferencias”.
Finalmente, el presidente adelantó que seguirá armando su equipo en función de las reformas estructurales que busca implementar. “Soy bilardista: lo que no funciona, se cambia”, concluyó.