En una noche clave para la estrategia legislativa del Gobierno, el presidente Javier Milei encabezó este martes una cena en la Quinta de Olivos con diputados de La Libertad Avanza (LLA) y del PRO, principal aliado parlamentario. El objetivo central del encuentro fue blindar los vetos presidenciales a las leyes que establecían un aumento en las jubilaciones y la declaración de emergencia en materia de discapacidad.
La reunión se produjo en la antesala de una semana decisiva, en la que la oposición intentará revertir en el recinto las decisiones del Ejecutivo. Según reveló la periodista Josefina Godoy Martínez (TN), el mandatario y su equipo buscaron delinear la estrategia para alcanzar los 86 votos —un tercio de la Cámara de Diputados— que permitirían sostener los vetos.
En la actualidad, el oficialismo cuenta con el respaldo asegurado de sus propias bancas y el apoyo incondicional del PRO, lo que suma 74 votos. Por eso, el desafío pasa por negociar con legisladores de provincias gobernadas por mandatarios dialoguistas y con representantes de bloques minoritarios. “Todos los diputados de LLA vamos a defender los vetos, es lo correcto. El que duda no debería ser miembro de La Libertad Avanza”, aseguró uno de los presentes.
La cena comenzó a las 20:00 y contó con la presencia del jefe del bloque del PRO, Cristian Ritondo, y referentes como Diego Santilli, Sabrina Ajmechet, Alejandro Finocchiaro, Silvana Giudici, Luciano Laspina, Daiana Fernández Molero y Alejandro Bongiovanni. También participaron legisladores de LLA, aunque esta vez no fueron invitados algunos aliados recientes, como los llamados “radicales con peluca” —Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat, Francisco Monti y Pablo Cervi— ni los integrantes del MID liderado por Oscar Zago.
Desde el MID, Eduardo Falcone expresó en redes sociales que acompañarán el veto a la moratoria previsional, pero reclamó diálogo para encontrar una forma de financiar el pago del 7,2% adeudado a los jubilados sin afectar el equilibrio fiscal.
El contexto de esta movida política se remonta al 10 de julio, cuando el Congreso sancionó tres leyes (27.791, 27.792 y 27.793) que incluían aumentos en las jubilaciones y bonos, la reincorporación de la moratoria previsional por dos años y la declaración de emergencia en discapacidad. Milei las vetó de forma total a través del Decreto 534/2025, argumentando falta de financiamiento y graves irregularidades en su tratamiento.
En una conferencia de prensa posterior, el Presidente defendió su decisión y anunció dos medidas para sostener el orden fiscal: prohibir que el Tesoro Nacional recurra a fondos del Banco Central para financiar gasto primario, y enviar al Congreso un proyecto de ley para penalizar la aprobación de presupuestos con déficit fiscal, estableciendo una regla que obligue al equilibrio o superávit financiero.
“Vinimos a arreglar la economía de raíz, sin atajos ni gradualismos. El único camino es el orden fiscal, monetario y cambiario”, afirmó Milei.
Además de los vetos, la cena incluyó el análisis de otros temas que la oposición busca instalar en la agenda, como la modificación del reparto de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y del impuesto a los combustibles líquidos, así como la comisión investigadora del caso $Libra, vinculado a la promoción de una criptomoneda que generó sospechas de estafa.
Este martes, la oposición logró un paso clave para destrabar esa comisión en Diputados, mientras que este miércoles la Comisión de Presupuesto y Hacienda tratará los proyectos impulsados por gobernadores para redistribuir los ATN y la recaudación del impuesto a los combustibles. Unión por la Patria aspira a obtener dictamen y llevar el tema al recinto el 20 de agosto.
