Partidarios y familiares de los rehenes capturados durante el ataque del 7 de octubre de 2023 por Hamas volvieron a marchar en Tel Aviv, reclamando la liberación inmediata de todos los cautivos y el fin de la guerra en Gaza. En ese contexto, el grupo islamista palestino emitió un comunicado en el que aseguró que está dispuesto a aceptar puntos centrales del plan presentado esta semana por el presidente estadounidense Donald Trump.
La respuesta de Hamas al plan de Trump
Según la declaración, Hamas aceptaría liberar a los rehenes y entregar la administración de la Franja de Gaza a una autoridad compuesta por tecnócratas palestinos independientes, con aval árabe e islámico, aunque aclaró que buscará negociar muchos otros aspectos del documento.
El anuncio llegó poco después de que Trump advirtiera que el grupo tenía hasta el domingo para aceptar el plan de 20 puntos, o de lo contrario enfrentaría “un infierno como nunca antes”. El mandatario estadounidense celebró la respuesta inicial y afirmó: “Creo que Hamas está listo para una paz duradera. Israel debe detener de inmediato el bombardeo para que podamos liberar a los rehenes de forma segura y rápida”.
Sin embargo, el movimiento no confirmó si aceptará la cláusula de desarme, una de las condiciones más firmes impuestas por Israel y Washington y que ya había rechazado en ocasiones anteriores.
Reacciones internacionales y condiciones
La ONU elogió la señal enviada por Hamas, destacando la posibilidad de que abra un camino hacia un cese de hostilidades. En su declaración, el grupo agradeció los esfuerzos de los países árabes, islámicos y de la comunidad internacional, así como los del propio Trump, en la búsqueda de un acuerdo que incluya intercambio de prisioneros y la entrada inmediata de ayuda humanitaria.
Hamas afirmó que está dispuesto a liberar a todos los rehenes, tanto vivos como los restos de los fallecidos, en el marco de la fórmula planteada por Estados Unidos, siempre que existan las condiciones necesarias para implementarla. Al mismo tiempo, reiteró su voluntad de negociar “de inmediato y a través de mediadores” los detalles del plan.
Un alto dirigente de Hamas, Mahmoud Mardawi, señaló a AFP que el texto de Trump es “vago, ambiguo y carente de claridad”, aunque confirmó que el movimiento no descarta seguir adelante con las conversaciones.
Los puntos centrales del plan
El proyecto estadounidense, anunciado junto a Benjamín Netanyahu a comienzos de semana, prevé la liberación inmediata de los 48 rehenes aún en poder de Hamas, de los cuales se estima que unos 20 siguen con vida. A cambio, Israel debería frenar la ofensiva, retirarse de gran parte del territorio y excarcelar a 250 palestinos condenados a cadena perpetua junto con otros 1.700 detenidos desde 2023.
El plan contempla además la reconstrucción de Gaza y la llegada de ayuda humanitaria, al tiempo que suspende la iniciativa de reubicar a miles de gazatíes en terceros países. La gobernanza del enclave, donde viven unos 2 millones de palestinos, quedaría en manos de una administración internacional supervisada por Trump y el ex primer ministro británico Tony Blair, aunque sin un horizonte claro de reunificación con Cisjordania para un eventual Estado palestino.
Contexto del conflicto
El ataque del 7 de octubre de 2023 marcó un antes y un después en la región: miles de combatientes de Hamas irrumpieron en Israel, atacaron comunidades civiles y un festival de música, causando la muerte de unas 1.200 personas y secuestrando a 251 más. La mayoría fue liberada mediante acuerdos previos, pero todavía quedan cautivos bajo control del grupo.
La respuesta israelí ha dejado, según el Ministerio de Salud de Gaza —dependiente de Hamas pero considerado la fuente más confiable por la ONU y expertos independientes— más de 66.000 palestinos muertos, aproximadamente la mitad mujeres y niños. Además, cerca del 90% de la población ha sido desplazada y gran parte del enclave quedó destruido.
En paralelo, tanto la administración Biden como la de Trump han respaldado militar y diplomáticamente a Israel, al tiempo que buscan una salida negociada para liberar a los rehenes y detener la escalada.
Con la presión del ultimátum de Washington y el aval de Netanyahu, la próxima ronda de negociaciones será clave para definir si el anuncio de Hamas se traduce en un acuerdo de alto el fuego o si la violencia vuelve a escalar en Medio Oriente.








