Guillermo Francos protagonizó una jornada de alto voltaje político en la Cámara de Diputados, donde presentó el informe de gestión N°144 en medio de la polémica por presuntas coimas en la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). El jefe de Gabinete calificó las acusaciones como “una operación política” y “acusaciones no fundamentadas”, enviando un mensaje directo a la oposición.
El funcionario, que enfrentó más de 1.300 preguntas de los legisladores, afirmó que las versiones sobre corrupción en la ANDIS responden a “un pequeño grupo de personas que en esta nueva Argentina ya no tienen lugar”. Además, explicó que la decisión de separar a Diego Spagnuolo y decretar la intervención del organismo respondió a la necesidad de garantizar auditorías y avanzar con denuncias judiciales.
“Cuando se conocieron las escuchas atribuidas a Spagnuolo, me sentí sorprendido. Lo importante era que esas expresiones se hicieron públicas, por eso hablé con el Presidente y resolvimos apartarlo e intervenir la agencia”, señaló Francos en el recinto.
La sesión no estuvo exenta de tensión. Hubo cruces a los gritos, gestos de burla hacia el jefe de Gabinete y hasta un momento en el que debió pedir respeto a un diputado de la oposición. También se registraron fuertes cuestionamientos a Martín Menem y a su primo Eduardo “Lule” Menem, mencionados en distintos pasajes como supuestos beneficiados por negocios vinculados al Estado.
Francos insistió en que detrás de las denuncias hay un “modus operandi populista” que busca desestabilizar al Gobierno en año electoral. “Estamos acostumbrados a causas que tapan causas, pero la Justicia ya trabaja para poner las cosas en su lugar”, subrayó, antes de advertir que si estas prácticas no se desmantelan “llevarán a la Argentina a la quiebra nacional”.
En paralelo, mientras el jefe de Gabinete respondía en Diputados, Javier Milei también se refirió al escándalo en Lomas de Zamora. Consultado por la prensa durante una caravana, el Presidente aseguró: “Todo lo que dice Spagnuolo es mentira. Lo vamos a llevar a la Justicia y vamos a probar que mintió”.
La exposición de Francos terminó marcada por la retirada de los diputados kirchneristas del recinto, lo que precipitó el cierre de la sesión. Sin embargo, el ministro coordinador se mostró firme en su postura: “No hay lugar para medias tintas. No hay turbulencia ni obstáculo que pueda desviar el rumbo que nos propusimos junto al Presidente”.
Con su tercera presentación en la Cámara baja, y quinta desde que asumió en 2024, Francos dejó en claro que la estrategia oficial pasa por blindar la gestión frente a las acusaciones y reafirmar el rumbo político y económico del Gobierno de Javier Milei.