En pleno centro de Quilmes, un allanamiento policial terminó con la detención de un hombre de 38 años y el hallazgo de un dispositivo que parece sacado de una película de espías: un inhibidor de señales con 22 antenas. El aparato, de color negro y aspecto intimidante, estaba escondido en una vivienda sobre la avenida Mitre. Pero no se trataba de un simple objeto tecnológico, era la pieza clave en una investigación por una violenta entradera ocurrida semanas atrás.

El hecho que motivó el operativo tuvo lugar el 14 de junio, cuando una familia fue sorprendida mientras dormía en su casa. Tres delincuentes armados irrumpieron en la vivienda, se llevaron dinero, celulares y una camioneta. Gracias a las cámaras del Centro de Emergencias Quilmes (CEQ), los investigadores lograron identificar a los sospechosos. Uno de ellos frecuentaba la vivienda donde finalmente fue detenido.
Durante el allanamiento, además del inhibidor, se secuestró documentación de interés y un DVR con grabaciones. El detenido intentó escapar agrediendo a un policía, pero fue reducido a los pocos metros. Ahora enfrenta cargos por robo agravado y resistencia a la autoridad.
¿Qué es un inhibidor de señales y por qué es tan peligroso?
Un inhibidor de señales, también conocido como jammer, es un dispositivo que emite ondas de radio para bloquear comunicaciones inalámbricas. Puede interferir con señales de celulares, GPS, Wi-Fi, y hasta con los controles remotos de autos. En manos equivocadas, se convierte en una herramienta silenciosa pero letal, impide que se activen alarmas o que se cierren las puertas de un vehículo, dejando todo listo para el robo sin forzar cerraduras ni romper vidrios.

Casos reales en Argentina, el crimen se moderniza
1500 robos mensuales: Según la Asociación Latinoamericana de Seguridad, en Argentina se denuncian más de 1500 robos mensuales con inhibidores de cierre centralizado. Los delincuentes actúan en shoppings, estaciones de servicio y escuelas, donde los conductores suelen distraerse.
Banda en San Lorenzo (Salta): A comienzos de 2025, la policía desarticuló una banda que usaba inhibidores para abrir autos sin forzar cerraduras. Robaban dinero, celulares y hasta ruedas de auxilio. También se les incautaron drogas y piezas mecánicas robadas.
Caso Fillol: El exarquero campeón del mundo, Ubaldo Fillol, fue víctima de esta modalidad. Le robaron las llaves de su casa desde su auto y luego entraron a su domicilio, llevándose su medalla del Mundial 1978.
Supermercados en Salta: En marzo de 2025, se reportaron robos en playas de estacionamiento de supermercados. Los ladrones usaban inhibidores para evitar el cierre de los autos y sustraer objetos del interior sin dejar rastros.
Caballito y Devoto (CABA): Seis delincuentes, entre ellos extranjeros, fueron detenidos tras abrir vehículos con inhibidores. Buscaban llaves de casas y documentos para luego cometer robos domiciliarios.
¿Y cuándo se usan legalmente?
Aunque suene contradictorio, los inhibidores también tienen usos legítimos. Un ejemplo concreto ocurrió durante la cumbre del G20 en Buenos Aires en 2018, cuando se desplegaron inhibidores para proteger al entonces presidente y a otros jefes de Estado. Estos dispositivos ayudaron a bloquear comunicaciones no autorizadas y prevenir ataques con drones o explosivos controlados a distancia.
¿Cómo protegerse?
- Verificá manualmente que tu auto esté cerrado, incluso si usaste el control remoto.
- Evitá dejar objetos de valor a la vista dentro del vehículo.
- Prestá atención al entorno: si ves a alguien con un handy o aparato extraño cerca de tu auto, desconfiá.
- Usá alarmas con sensores de movimiento o localizadores GPS que no dependan solo del cierre remoto.