El Gobierno nacional dio un paso clave en su política de desregulación económica: eliminó las retenciones a las exportaciones de 4.411 productos industriales, equivalentes al 88% del total de manufacturas sujetas a este tributo. La medida fue formalizada este miércoles mediante el Decreto 305/2025 publicado en el Boletín Oficial.
Según detallaron desde la Casa Rosada, la decisión impacta favorablemente sobre unas 3.580 empresas exportadoras, cerca del 40% de todas las firmas argentinas que venden al exterior. El objetivo principal es “mejorar la competitividad” de la industria local, que hasta ahora debía enfrentar retenciones que variaban entre el 3% y el 4,5% sobre el valor exportado.
“Las retenciones desincentivaban las exportaciones y afectaban la competitividad externa de nuestras empresas”, señalaron fuentes oficiales. Con esta decisión, gran parte de la industria nacional queda liberada del pago de derechos de exportación, salvo algunos sectores estratégicos como el hierro, el acero, el aluminio, la petroquímica y la industria automotriz, que aún mantienen tributos vigentes.
Entre los productos beneficiados se incluyen autopartes, maquinaria agrícola, agropartes, productos de vidrio, óptica, cosmética, relojería, elementos farmacéuticos, cables, tubos y metales industriales, entre otros.
Desde el Ministerio de Economía, liderado por Luis Caputo, remarcaron que la medida busca incentivar el crecimiento económico y la generación de divisas sin poner en riesgo el equilibrio fiscal. “La eliminación de impuestos distorsivos es parte del programa de estabilización macroeconómica y fomento de la actividad económica”, expresaron.
En 2024, las exportaciones de los productos ahora exentos alcanzaron un valor de 3.804 millones de dólares, lo que destaca la importancia de este segmento en el comercio exterior argentino.
La medida se suma a otras acciones similares adoptadas en los últimos meses, como la eliminación de derechos de exportación a productos agroindustriales de economías regionales y cadenas de valor como la textil algodonera, papelera y de alimentos y bebidas.
Al presentar la medida en redes sociales, el ministro Caputo celebró: “A esto vinimos. A devolverle los recursos al sector privado, ahorrando desde el Estado para bajar impuestos”. Además, contrastó este rumbo económico con el del kirchnerismo, al que acusó de duplicar el gasto público y generar altos niveles de pobreza.
“Hoy la economía crece al 6%, y sacamos 10 millones de argentinos de la pobreza”, sostuvo Caputo, y cerró con un mensaje de fuerte contenido político: “Es kirchnerismo o libertad. Es pobreza o progreso. Es vergüenza o dignidad”.
La eliminación de las retenciones industriales representa otro eslabón en la estrategia del Gobierno de Javier Milei de fomentar el libre mercado, reducir la presión impositiva y dinamizar las exportaciones como vía de crecimiento económico.