Una clínica de la localidad de Libertad, en el partido bonaerense de Merlo, fue clausurada preventivamente por el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires tras comprobarse que arrojaba residuos patogénicos directamente a la vía pública. La denuncia fue impulsada por vecinos de la zona, quienes detectaron entre los desechos elementos altamente contaminantes como agujas, jeringas, gasas con sangre, sondas y medicamentos.
El establecimiento en cuestión es la Clínica San Juan Bautista, ubicada en la avenida Eva Perón al 4800. Si bien continúa operando debido a la presencia de pacientes internados, fue judicialmente intimado a cumplir con la normativa vigente que regula el manejo de residuos peligrosos.
La investigación comenzó luego de que varios residentes alertaran sobre montículos de basura domiciliaria mezclados con insumos médicos visiblemente contaminados. A raíz de estas denuncias, la Policía Ecológica y Científica realizó un allanamiento autorizado por el Juzgado de Garantías N°4 de Morón, a pedido del fiscal Fernando Siquier Rodríguez, titular de la UFI N°6.
Durante el procedimiento se hallaron 55 bolsas negras en la vereda trasera de la clínica, de las cuales 32 contenían residuos patogénicos tipo B, considerados peligrosos para la salud y el ambiente. Entre los elementos recolectados había restos hemáticos, pañales usados, catéteres, frascos de suero y medicamentos vencidos, todos dispuestos sin ningún tipo de protocolo ni documentación obligatoria.
Desde la fiscalía advirtieron que la disposición inadecuada de estos residuos representa un “alto riesgo sanitario y ambiental”. El accionar de la clínica infringe tanto la Ley Nacional 24.051 sobre residuos peligrosos como la Ley Provincial 11.720 que regula específicamente los desechos patogénicos del sistema de salud.
El Ministerio de Salud dictó una clausura preventiva: el establecimiento no fue cerrado completamente pero quedó bajo observación y deberá presentar la documentación que certifique una gestión adecuada de los residuos, así como contratar un servicio habilitado para su retiro y disposición final.
Durante el allanamiento también fueron identificados los responsables administrativos, médicos y directivos de la clínica, quienes podrían enfrentar cargos penales si se comprueba una actuación dolosa o negligente en el manejo de los residuos contaminantes.